*.- Tan paradisiaco balnerio que no ven los matamorenses.
*.- La mar azulada entrega regalos a sus visitantes.
Oscar Treviño Jr.
Lo mejor de Matamoros es su playa Bagdad: la mar es de un tono azul azul. Tiene una extensión de 95 kilómetros lineales aproximadamente.
La Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales en Tamaulipas, le ha dado una concesión de cuatro kilómetros a la Presidencia Municipal.
Sus dunas granuladas forman caprichosos montículos desde el norte al sur. Los turistas normalmente van al norte, pero en el sur hay unos tesoros valiosos:
Basta con ver el área denominada “El Conchillal” que tiene esa magia que no solamente es deleite de los niños.
Se puede ver caracolas de diferentes tamaños, cochas tan blancas que contrastan con otras cienosas, estrellas de mar, pero todos esos regalos de la mar se pueden ver cuando el sol comienza a salir por esas aguas azulosas.
Los tiburones
Precisamente los pescadores del sur se dedican a la captura de diferentes especies pero sobre todo el tiburón que según dicen su aleta es afrodisíaca.
Esta especie que es arrastrada por la orilla de la playa tiene un peso de 150 kilos sin almorzar, pero fue atrapado allende el mar, porque rara, pero muy rara vez se acercan a la orilla en virtud de que su depredador esta al asecho.
La paradoja
Pese a que la playa Bagdad - nadie el por qué del nombre-, anteriormente llamada General Lauro Villar y muy atrás Washington es de aguas tranquilas y planas una gran parte de los matamorenses no le tienen cariño, en otras palabras la desprecian por su suciedad y paradójicamente no contribuyen a mantenerla limpia.
Sin embargo la playa Bagdad, recibe muy gustosamente recibe a los visitantes, que una gran parte vienen de Nuevo León, Saltillo, Monclava, Torreón, San Luís Potosí, Ciudad Victoria y a veces de Estados Unidos.
La gente de poder económico dice: “es la playa para los jodidos”, nosotros vamos a la “Isla del Padre” en Texas.
El Encanto
En el día en temporada de verano la temperatura oscila entre los 20 y 25 grados centígrados, pero durante la noche se puede percibir el aire fresco y no pocos jóvenes y familias acuden a las famosas “lunadas”: se sientan en la arena, encienden fogatas, asan volovanes y bombones. Es un olor delicioso de recuerdos de niñez.
Las personas pueden estirar su mano hacia el cielo y casi pueden tomar una de esas estrellas brillantes y otros acarician la guitarra para entonar canciones románticas y a veces muy mexicanas.
También durante la noche hay algunos campamentos de pescadores con caña y con el sedal enredado en botes de cerveza con la plomada y carnada, dispuestos a ser agraciados por la mar y les entregue uno de esos deliciosos peces.
Las inversiones
Pese a que la playa Bagdad puede se explotado turísticamente no se hace ¿por qué? es la misma pregunta desde hace más de 50 años mínimo. Hay pocos hoteles pero no llegan ni a las dos estrellas.
Pero no por eso deja de ser una de las mejores playas, porque uno puede adentrarse en la mar hasta 10 metros y le agua da a la cintura.
El nudismo
Pocos saben que hay una zona nudista. No tiene avisos pero se puede observar a los naturistas en temporada de verano, se ubican como a 20 metros del área de los pescadores. Normalmente vienen de Estados Unidos, pero vamos que no se enteren los “moralistas” locales porque ellos se verán en graves aprietos.
